Aunque se creía perdido en los incendios de la quema de conventos de 1931 y la Hermandad llegó a encargar una nueva Imagen a D. Antonio Castillo lastruci, la Imagen original del Cristo fue encontrada a la venta en una chamarilería entre infinidad de trastos viejos por D. Tomás Valcárcel Deza, y es que una familia pudiente lo rescató y lo mantuvo oculto durante la guerra hasta que lo tuvieron que poner a la venta por su difícil situación económica.

Se trata de una escultura valiosísima del siglo XVIII sobre cuya autoría los expertos no terminan de pronunciarse, aunque lo estudios más recientes la vinculan como principal hipótesis al escultor valenciano D. José Esteve Bonet, autor de la Virgen Inmaculada que preside la capilla adjunta a la de la Hermandad en la Basílica de Santa María. 

El Señor aparece sentado y tiende la mano a la Samaritana que le mira portando un cántaro de agua. La talla es “de vestir”, por lo que en lugar de tener tallados en la madera los ropajes, luce túnica y saya confeccionadas en ricos tejidos, además de un juego de potencias chapadas en oro. Todo ello siguiendo los cánones barrocos de la zona del Levante. 

La primera representación de esta escena para la Semana Santa de la cual se tiene connstancia, es la tallada en el siglo XVIII por D. Francisco Salzillo y Alcaraz para Cartagena. Una imagen que se perdió en la Guerra Civil española, por lo que la talla de Jesús en Samaria de nuestra Hermandad sería la Imagen más antigua de la que se tiene constancia en esta temática. Un verdadero tesoro artístico y patrimonial. Su datacion en el siglo XVIII se llevó a cabo tras un estudio radiológico en la Cínica Medimar de Alicante en el año 2005.

Su última restauración se llevó a cabo en 2022 por D. José Manuel Pérez Soriano. 

Recibe culto en su altar propio en la Capilla Sacramental de la Hermandad en la Basílica de Santa María.